La pecera, por regla general, suele ser la primera casa de tus mascotas favoritas: esos preciosos peces pequeños de agua fría, normalmente de vibrantes colores. Supone también una primera experiencia en el cuidado de un animal. Una pecera se caracteriza, igualmente, por su forma ovalada y su escaso tamaño. Recuerda no obstante que, a diferencia de un acuario, tendrás que cambiar el agua muy a menudo y limpiar el interior de forma manual.
¿Qué tipo de peces son aptos para una pecera?
Ten en cuenta (pues es muy importante para la supervivencia) que solo podrás guardar peces de agua fría, como el goldfish (los clásicos naranjas de largas aletas), el pez ojos de burbuja, el telescopio, el tetra (los hay de todos los colores), la carpa koi (procedente de Asia), el betta (con una cola que parecieran pétalos), el barbo rosado o el neón chino. Todos, además, debido a su escaso tamaño, son perfectos para la extensión de una pecera. Otra cosa muy importante que tener en cuenta es que deben ser peces de agua dulce, que es la que sale del grifo.
Tamaños y formas de una pecera
Peceras tradicionales
Las hay pequeñas, de unos veintitrés centímetros de diámetro y otras más anchas, que alcanzan hasta los cuarenta, con una capacidad de 30 litros. Algunas llevan también tapas incorporadas o soportes en colores. Además, muchas de ellas admiten iluminación led. Se puede incorporar, igualmente, piedras o plantas, para hacer más agradable la vida al pez. No lo llenes demasiado, sin embargo. Asimismo, puedes hacer uso de bombas de aire, para crear corrientes, o de filtros limpiadores. Algunos modelos han sido pensados para colgarse en la pared (¡asegúrate bien de la fijación!). Existen también modelos más rectangulares. Especialmente para los niños, hay modelos a medio camio entre la pecera y el acuario, con plantas artificiales y piedras de colores.
Auge de las ecosferas
Todas las peceras, por regla general, son ovaladas. En su mayoría son redondas, pero también existen algunos modelos novedosos en forma de huevo. Muy populares se han vuelto las denominadas «ecosferas», con 50 centímetros de diámetro y capacidades de hasta 50 litros. Se venden directamente con organismos vivos, con camarones que viven entre algas, sin ningún tipo de mantenimiento. Se trata de mundos en miniatura desarrollados por la propia NASA realmente sofisticados.
¿Dónde colocar una pecera?
Elegir la localización de una pecera no es algo baladí. De ello depende, en gran parte, la supervivencia de nuestra mascota. Según los profesionales del sector, se debe alejar lo máximo posible de la luz directa del sol, así como de cualquier otra fuente calórica. Un exceso de temperatura podría ocasionar un calentamiento realmente alto del agua, lo que pondría en peligro la vida de los inquilinos de nuestra preciosa pecera. Además, siempre se recomienda empezar con peceras de agua fría (las más habituales) para posteriormente, si así se desea, dar el salto definitivo al mundo del acuario.
¿Y cómo alimentar a los peces?
Siempre partiendo de la premisa de que la comida ha de ser ligera, se puede recurrir a diferentes alternativas:
- Alimento vivo: se corresponde con pequeños crustáceos o «pulgas de agua», larvas de mosquito o camarones. Se ha de tener especial cuidado en la calidad del producto, para no transmitir enfermedades.
- Alimento seco: es el más popular y se vende en diferentes formatos (en barras, gránulos o copos). Resulta especialmente recomendable para especies tropicales aunque debe combinarse con otro tipo de alimento.
- Alimento liofilizado: es muy parecido al anterior en la consistencia, con la peculiaridad de que se trata de alimentos deshidratados, de modo que se conservan a la perfección sus nutrientes.
- Alimento fresco: gambas o mejillones convenientemente troceados, en función del tamaño del pez. La única pega estriba en que, a menudo, manchan el agua, por lo que debe cambiarse muchas veces.
- Alimento congelado: lo conforman los mismos animales que los presentados en la categoría de alimentos vivos, con la característica principal de haberse conservado refrigerados.
- Papillas: todos los alimentos anteriores se pueden presentar convenientemente triturados, en papilla en vez de en trozos pequeños. El inconveniente es que también manchan el agua.
En suma, una pecera resulta ideal para entrenarse en el cuidado de mascotas por parte de los niños y aficionados.